Llegamos a la sesión del 3 de junio con la lectura de "Venganza en Sevilla" terminada, y la opinión general de que la obra ha gustado en el Club; de hecho, y como ya avanzamos, quien ha podido ha ido alternándola con "Tierra Firme", y el resto se encuentra a la espera de poder hacerse con algún ejemplar para hacerlo. Esto no ocurriría si el libro no hubiera interesado.
Con esta idea, nos pusimos a planificar el Encuentro de Clubes de Lectura que tendríamos, el Jueves día 9 de Junio, con la autora: hora de recogida del autobús para ir a Toledo, organización y horario de todos los actos, etc.
Este año el Encuentro se programó en Toledo y hemos tenido la suerte de que Academía de Infantería de Toledo aceptara la petición de la Asociación El Libro de los Clubes para acogerlo; razón que seguramente ha influído en el hecho de que seamos tantas personas las que participamos en el -más de seiscientas frente a las aproximadamente cuatrocientas de los últimos años-, ya que es un edificio emblemático de Toledo, y que muchas personas no han tenido ocasión de visitar. Allí pasaríamos toda la tarde: primero el Encuentro con la autora, después la visita a la que se denomina parte noble del edificio, la firma de ejemplares y, para terminar, el cóctel.
Durante la semana ya fueron apareciendo algunas noticias en la prensa digitial, que se hacían eco del XIIIº Encuentro de Clubes de Lectura de la Provincia de Toledo y de la visita de Matilde Asensi.
Llegado el día, todos los Clubes participantes fuimos llegando de 16'30 a 17'00 horas aproximadamente, momento en el que -una vez todos acoplados en el Aula Magna-, las autoridades pertinenetes nos dieron la bienvenida. Hubo la habitual presentación de la autora, y comenzó el Encuentro con Matilde Asensi, que resultó ser encantadora: una gran conversadora que salpica el diálogo con anécdotas, pinceladas de humor, apuntes profesionales, datos históricos... De verdad, toda una delicia; nada que ver con otras escritoras frías, distantes y antipáticas, de cuyo nombre no nos olvidamos.
Después, nuestro grupo (éramos tres de doscientas personas cada uno), permaneció en el Aula Magna para ver un video informativo sobre la historia y actividad de la Academia de Infanteria. A continuación, visitamos la parte noble del edificio: Patio de armas, Capilla, Comedor, Biblioteca, etc., y por último, nunca mejor dicho, pues fuimos el último Club de todos, pasamos a la firma de ejemplares. Y Matilde Asensi seguía simpática y con buen humor después de más de seiscientas firmas.
Todo muy bien organizado por la responsable del Club de Lectura de la Biblioteca del barrio de Santa Bárbara de Toledo, Manuela Gonzálvez, sus voluntarias, responsables de la Junta Directiva de la Asociación, y -por supuesto- por las autoridades y personal de la Academia de Infanteria.
Para terminar, el cóctel. Un cóctel que no era gratuíto, por el que cada persona había pagado 20 €, y que estaba mal preparado, era escaso, resultaba triste... Triste broche para una tarde tan redonda, gracias a la caradura de la empresa de hostelería que trabaja para la Academia que -en nuestro caso- se portó fatal y no estuvo a la altura. Por cierto, en cuanto sepamos su nombre, estaremos encantados de facilitároslo, por si las moscas.
Llegado el día, todos los Clubes participantes fuimos llegando de 16'30 a 17'00 horas aproximadamente, momento en el que -una vez todos acoplados en el Aula Magna-, las autoridades pertinenetes nos dieron la bienvenida. Hubo la habitual presentación de la autora, y comenzó el Encuentro con Matilde Asensi, que resultó ser encantadora: una gran conversadora que salpica el diálogo con anécdotas, pinceladas de humor, apuntes profesionales, datos históricos... De verdad, toda una delicia; nada que ver con otras escritoras frías, distantes y antipáticas, de cuyo nombre no nos olvidamos.
Todo muy bien organizado por la responsable del Club de Lectura de la Biblioteca del barrio de Santa Bárbara de Toledo, Manuela Gonzálvez, sus voluntarias, responsables de la Junta Directiva de la Asociación, y -por supuesto- por las autoridades y personal de la Academia de Infanteria.
Para terminar, el cóctel. Un cóctel que no era gratuíto, por el que cada persona había pagado 20 €, y que estaba mal preparado, era escaso, resultaba triste... Triste broche para una tarde tan redonda, gracias a la caradura de la empresa de hostelería que trabaja para la Academia que -en nuestro caso- se portó fatal y no estuvo a la altura. Por cierto, en cuanto sepamos su nombre, estaremos encantados de facilitároslo, por si las moscas.
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